Hablar de activos subyacentes es hablar forzosamente de productos derivados, y en México cada vez más inversionistas están atraídos por los beneficios que estos productos ofrecen a sus portafolios de inversión.
Los derivados son instrumentos financieros cuyo precio se basa o se deriva de un activo separado. El activo subyacente de un derivado es el instrumento financiero, como una acción, índices accionarios o tasas de interés en el que se basa el precio del derivado.
De acuerdo con el Mexder, los activos subyacentes más utilizados en México para la emisión de contratos de derivados financieros son: acciones individuales, canastas de acciones, índices accionarios, tasas de interés y divisas.
Las opciones y las acciones se pueden utilizar para describir qué es un instrumento subyacente. Supongamos que compras una opción call sobre la acción Z, lo que te da el derecho, pero no la obligación, de comprar la acción ABC al precio de ejercicio hasta el vencimiento de la opción.
En este ejemplo, las acciones de Z son el instrumento subyacente de la opción que le da al contrato su valor, es decir, el precio de la opción se basa en el precio de la acción subyacente Z. Si el precio de la acción cambia, el precio de la opción también se verá afectado directamente, proporcionándote la información sobre si vale la pena ejecutar la opción o no.
El instrumento subyacente puede ser cualquier clase de activo negociable, por ejemplo, divisas. Si compras un contrato de futuros sobre el dólar estadounidense para asegurar el tipo de cambio en una fecha futura, el dólar sería el instrumento subyacente del contrato de futuros que le da al contrato su valor intrínseco.
Sin embargo, a diferencia de los contratos de opciones, los contratos de futuros y forwards son una obligación tanto para el comprador como para el vendedor. El comprador de un contrato de futuros acuerda comprar el activo subyacente al vencimiento del contrato, mientras que el vendedor acepta proporcionar el activo subyacente al vencimiento.
Los productos y contratos derivados son una innovación significativa que ha mejorado los mercados financieros modernos y les ha dado forma tal como los conocemos hoy.
Incorpóralos a tu cartera
A medida que te familiarices con los diferentes tipos de derivados y estrategias, puedes comenzar a incorporarlos en tu cartera de inversiones. Toma en cuenta que, independientemente de tu experiencia y conocimiento, los derivados solo deben constituir una parte de tu portafolio.
Los derivados son instrumentos financieros un tanto difíciles de entender. Pueden ser excelentes herramientas para aprovechar tu cartera al tener mucha flexibilidad y decidir si ejercerlos o no.
Con la estrategia correcta, los derivados se convierten en una parte valiosa de tu cartera de inversiones. Acércate a nuestros asesores en Grupo Financiero Monex quienes te ayudarán a darle potencial a tu portafolio con nuestros productos especializados.