Si bien la definición del éxito es subjetiva, existen ciertas reglas de oro que se pueden aprender y aplicar en el aspecto personal y laboral. Aquí la historia de una marca que ha trascendido y hoy es todo un estilo de vida.
“El éxito no es un accidente, es trabajo duro, perseverancia, aprendizaje, estudio, sacrificio, y sobre todo amar lo que estás haciendo”- exfutbolista brasileño Pelé.
La empresa Louis Vuitton comenzó elaborando baúles con la finalidad de que las pertenencias de los viajeros siempre estuvieran protegidas, ya que en 1900 las personas solían transportar sus cosas en armarios o baúles planos, y debido a ese ineficiente método constantemente sus pertenencias les eran robadas.
Louis Vuitton nació en 1821, en una familia de pocos recursos, la cual se dedicaba a hacer y vender cosas de madera. Cuando cumplió 16 años, con el fin de encontrar mejores oportunidades laborales y tener un mejor nivel de vida, realizó un viaje a pie hasta París, en el que recorrió casi 400 km.
En este viaje Louis pudo analizar la manera en la que se transportaban las pertenencias, y concluyó que estos procesos eran inadecuados e inseguros, ya que la rudeza de los transportes era mayúscula; así que se dio a la tarea de desarrollar distintos ejemplares de maletas buscando un estilo único y de alta calidad.
En su búsqueda implementó también un sistema de cierre con doble hebilla de resorte, al cual patentó tiempo después, e incluso en una ocasión retó al ilusionista Harry Houdini a escapar de un baúl cuyo candado tuviera la insignia de su marca, pero el ilusionista no aceptó debido a la buena calidad y resistencia de los cierres.
Al día de hoy el éxito de Vouitton se ha basado en dos cosas: la primera en que pudo identificar una necesidad y la segunda es que solucionó el problema de las pertenencias de manera útil y con estilo.
Parte de su éxito también radica en que sus creadores y directores creativos no se han cruzado de brazos y constantemente evolucionan la marca, siempre tratando de conservar la esencia del producto, de seguir ofreciendo artículos que resuelvan las necesidades de sus consumidores y que a la vez combinen estilo y modernidad.
Se trata de desarrollar marcas que contemplen a todos sus consumidores. Hoy en día cuando se trata de seleccionar los rostros de las imágenes publicitarias de Vuitton se buscan mujeres maduras que sean dignas de contar una historia mediante la toma fotográfica, para que el público femenino se identifique con ellas.
Al día de hoy esta empresa es líder mundial en el mercado de artículos de lujo y se ha dedicado a tener siempre en cuenta los cambios sociales, culturales y globales, y a explorar nuevos nichos en el universo del consumidor.
Fuente: louisvuitton.com
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