La Línea de Crédito Flexible (LCF) atiende la demanda de préstamos de prevención y mitigación de crisis de países con marcos de política, e historiales económicos sólidos.
Este instrumento se diseñó por el Fondo Monetario Internacional (FMI) con el fin de poder prestar dinero a países que tienen escasez de liquidez, y así puedan destinar los instrumentos de préstamo en diversas necesidades y circunstancias.
En abril de 2009 el FMI aprobó la Línea de Crédito Flexible a México. Actualmente está contratada por 47,292 millones de Derechos Especiales de Giro, activo de reserva internacional creado en 1969 por el FMI, cuyo valor está basado en el dólar estadounidense, el euro, la libra esterlina y el yen japonés.
¿Qué pueden hacer los países con la Línea de Crédito Flexible?
- Pueden utilizar la línea de crédito en cualquier momento dentro de un período predeterminado o usarlo como un instrumento precautorio.
- Tienen acceso amplio e inmediato a recursos del FMI.
- Al cabo del primer año, los países que desean usarla deben hacer un examen de derecho de acceso, estos reembolsos deben efectuarse de 3 a 5 años.
- La LCF opera sin límite de acceso a los recursos del FMI, pero esta necesidad de recursos debe ser evaluada individualmente.
A lo largo del tiempo, el volumen de los préstamos que el FMI ha otorgado han cambiado. En los años 90 el proceso de transición de Europa Central y Oriental, y las crisis de las economías de mercados emergentes dieron lugar a nuevos incrementos de la demanda de recursos, la cual se mantuvo elevada durante los primeros años del 2000 debido a las profundas crisis ocurridas en América Latina y Turquía.
Con los años, el FMI ha creado varios instrumentos de crédito, con base en las circunstancias específicas de los países miembros. Los países de bajo ingreso pueden obtener préstamos en condiciones concesionarias por medio del Servicio de Crédito Ampliado (SCA), el Servicio de Crédito Stand-by (SCS) y el Servicio de Crédito Rápido (SCR). Es importante mencionar que los préstamos concesionarios tienen tasas de interés iguales a cero hasta fines de 2016.
Datos del Banco de México (BM) indicaron que en Noviembre de 2015 el Directorio Ejecutivo del FMI renovó para México la LCF por un monto de 65,000 millones de dólares y éste tendrá vigencia por un año más.
Lo anterior gracias al buen uso que las autoridades mexicanas le han dado. Christine Lagarde, Directora General del FMI, pone a México como un buen ejemplo de país que ha sabido usar este instrumento efectivamente en casos de contingencia.
Fuente: Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco de México (BM)
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